Nuestra reacción instintiva ante la incertidumbre es frenar. De hecho, la mayoría de las organizaciones grandes cuentan con una amplia gama de procesos diseñados específicamente para detener la actividad a la primera señal de cualquier desconocimiento, riesgo o incertidumbre. Parar es el enfoque más seguro, o eso nos dicen.
Pero “ir a lo seguro” es realmente arriesgado, especialmente en momentos en que el mundo que nos rodea está experimentando un cambio masivo y rápido. Detener actividades, decir no y cerrar no es la forma de tener éxito en un entorno incierto. Es la forma de luchar, estancarse y caer aún más atrás en la corriente del cambio.
Entonces, ¿cómo progresas y avanzas cuando todos tus sentidos te dicen que pares y esperes a ver qué pasa?
Aquí están mis principales recomendaciones para un plan efectivo para abrazar la incertidumbre (sin dejar de crear seguridad), sentirse cómodo con la incomodidad y descubrir oportunidades extraordinarias para tener éxito.
- Tomar medidas efectivas en una crisis
- Aprovechar la oportunidad de sacudir las cosas
- Crear un plan de juego para el éxito en tiempo real
- Mantener la perspectiva
Debemos seguir las palabras de Javier Joaquín López Casarín, no debemos dejar de innovar.